El mundo en un click: Continuando con el año 2004

Ya es hora que me incorpore a seguir con mis historias en el blog, pero es que como hace tanto frÍo no dan ganas de hacer nada, además tengo un constipado bastante molesto desde hace ya un mes y no se me quita por más cosas que me tome, así que no me queda otro remedio que tener resignación y aguantar hasta que quiera olvidarse de mí. Después de pasadas las fiestas navideñas me dispongo a continuar con el año 2004 .

El verano para mí fue maravilloso. Esta vez decidimos irnos a Egipto, para lo cual escogimos un viaje de 15 días que incluía dos cruceros (uno por el lago Nasser y otro por el Nilo), tres días en Hurgada y cuatro días más en El Cairo. Nada más llegar nos estaba esperando el guía que nos llevó en un autobús al hotel Le Meridien Pyramids, situado en Guiza, así que lo primero que nos llevaron a ver fueron las Pirámides de Guiza. ¡¡Qué emocionante fue para mí estar en aquella esplanada del desierto viendo las maravillosas Pirámides de Keops, Kefrén y Mikerinos y la famosa esfinge!! Hicimos fotos como descosidas y estuvimos trepando por las piedras de la pirámide de Keops y visitamos la pirámide de Mikerinos por dentro hasta llegar a la cámara funeraria. Para ello, bajas por una rampa en una pendiente continua por un pasillo larguísimo, con las piernas flexionadas todo el tiempo y agachando la cabeza para no dar con ella en el techo del túnel. ¡Fue muy emocionante!

Yo no os recomiendo ir a Egipto en agosto, pues pasas un calor horroroso, y eso que la mayoría de las excursiones las hacíamos por la mañana temprano, pero no nos importaba pasar un poco de incomodidad con tal de ver tan grandiosos monumentos. Después nos llevaron a Menfis, par ver la Estatua de Ramsés II, y a Saqqara donde se encuentra la pirámide escalonada de Zóser, anterior en antigüedad a las propias pirámides de Guiza. Entre tanto monumento, también quedaba tiempo para visitar el Museo de las Esencias y, de paso, hacer algunas compritas (nos trajimos para España, como no, perfume de flor de loto).

Al día siguiente, nos embarcamos en el Nubian Sea para realizar un crucero de cuatro días por el Lago Nasser. Os dejo unas cuantas fotos del interior del crucero en el que, por cierto, estuvimos muy bien atendidas. Por las mañanas realizábamos excursiones para visitar algunos "templos menores", que no por ello menos bonitos, y por las tardes nos dedicábamos al desansar en el barco y por las noches asistíamos a las fiestas que organizaban para nosotros. Por cierto, la comida era bastante buena, podías elegir entre comida europea y la egipcia (nosotros combinábamos los platos a nuestro gusto) y me sorprendió porque encontré bastantes platos egipcios muy ricos.