On Ice Madrid se trata del mayor nacimiento del mundo esculpido en hielo, con 150 figuras sobre temas navideños, participaron en su creación cerca de 60 artistas internacionales recreando el portal de Belén con la Virgen, San José, el Niño Jesús, la mula, el buey, los reyes magos, así como pastores, ángeles, un gran árbol navideño, aparte de innumerables animales. La gran carpa estaba situada bajo la torre Picasso en Azca. Nos lo pasamos muy bien, nos gustó muchísimo. A pesar del frío intenso que te dejaba las manos congeladas,hicimos algunas fotos. Además de éste nos dio tiempo para visitar otros Belenes de la comunidad de Madrid, todos ellos a cual más bonitos. Después como se acercaba la hora de comer buscamos un restaurante donde saciar nuestro apetito y poder descansar un ratito.
Como nos hizo un día maravilloso, después de comer nos dirigimos al parque del Retiro donde se encontraba "el árbol de los deseos". Se trataba de una estructura metálica figurando un pino hueco custodiado por siete duendes, duendecillos, caracoles gigantes y otros seres mágicos que iban recibiendo a los visitantes dándonos lápices y globos de colores para que escribiéramos nuestros deseos en ellos; luego ya en el hueco del árbol todos los asistentes repetíamos una frase mágica que nos decían los duendecillos y soltábamos los globos al mismo tiempo, quedando éstos encerrados dentro del monumental pino transparente. Así, el pino se iba llenando de innumerables globos multicolores repletos de deseos de paz, salud, alegría y felicidad que la gente solicitaba para el nuevo año. El día de Reyes por la tarde tuvo lugar la apertura de la copa del pino y pudimos contemplar la ascensión al cielo de todos los globos y, con ellos, nuestros deseos.
Ya por la tarde-noche, como estábamos algo cansados cogimos un autobus turístico que nos paseó por las calles iluminadas de Madrid hasta terminar en casa de mi sobrinas y así terminamos el día 30 de diciembre.
Al día siguiente, como mis sobrinas querían hacer los preparativos de la cena de Nochevieja, decidimos dejarlas trabajar con tranquilidad y así aproveché con mi hija Pilar para dar un paseo por el centro de Madrid. Visitamos la catedral de la Almudena donde hicimos varias fotos y luego por la tarde, ya con mis sobrinas, nos paseamos por las calles para ver el ambiente festivo y hacer tiempo hasta la hora de la cena de Nochevieja y luego tomarnos las uvas de la suerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario