Una vez instaladas de nuevo en el hotel Meridien Pyramids, el guía nos propuso llevarnos a ver algunos sitios interesantes de la ciudad. Lo primero que vimos fue el monumento al soldado desconocido: es bastante grande, tiene forma de pirámide y en él también se encuentra la tumba del presidente Anwer Sadat, escoltada por dos guardias permanentemente. Es una parte muy lujosa, el suelo es de mármol con un brillo extremo; al otro lado de la carretera se encuentra una gran marquesina para que el presidente pueda presidir los desfiles. También estuvimos en la ciudad de los muertos... sí, sí, habéis leído bien, los vivos conviven con los muertos, tienen su casa al lado de la tumba, ocupándose de mantenerla arreglada. En realidad se trata de gente de pocos recursos, que han ido ocupando partes del cementario como vivienda.
Después nos dedicamos a visitar algunas mezquitas: La del sultán Hassan, situada al pie de la Ciudadela, está considerada como una de las construciones mamelucas religiosas más grandes del mundo del siglo XIX, con unos 150 metros de largo, 36 de alto y un minarete de 68 metros de altura. En su interior se encuentra la sala central con la fuente de las abluciones (donde los islámicos se lavan los pies antes de sus oraciones), cuatro grandes salas donde se enseñaban las escrituras, muros trabajados con el mínimo detalle donde se podrán observar pasajes del Corán, así como el mausoleo del Sultan Hassan.
La mezquita de Al Rifai está ubicada junto a las murallas de La Ciudadela, construida por Saladino, justo enfrente de la mezquita del sultan Hassan. En su interior se puede visitar la tumba donde la familia real egipcia fue enterrada y también el mausoleo del Sha de Irán.
El Cairo es una ciudad tan atractiva y con tantas cosas para ver que el tiempo pasa sin dar respiro a los ojos, ( por lo menos es lo que me pasó a mí). La llaman la ciudad de las mil mezquitas o minaretes. En la próxima entrada os contaré todavía algunas cosas más que, como se suele decir, me quedan en el tintero.
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De Hurgada a El Cairo |
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Monumento al soldado desconocido |
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Monumento a la memoria del soldado desconocido |
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Guardias ante la tumba de Anwer Sadat |
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Monumento dedicado para presidir los desfiles |
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Mezquita del Sultan Hassan |
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Escalinata a la entrada de la mezquita |
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Frente a la mezquita del sultan Hassan |
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Exterior de las mezquitas |
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Mezquita de Hassan, patio de las Abluciones |
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Interior, fuente de albastro |
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Interior de la mezquita de Hassan |
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Detalle de la pared de una de las salas de la mezquita |
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Artesonado del techo de la mezquita |
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Interior de la mezquita, con textos del Corán |
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Interior de la mezquita de Hassan |
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Exterior mezquita |
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Mezquita de Hassan. Sala donde instruyen en el Corán a los niños |
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Desde el hotel Merydien, vista de las pirámides |
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Guiza, desde la piscina del hotel, vista de las pirámides |
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Guiza, estanque a la entrada del hotel. |
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